Mi experiencia en Venecia
Maria Moraguez

Tengo tantas cosas a explicar que no sé por dónde empezar, así que primero explicaré en qué ha consistido mi experiencia. He pasado 2 meses trabajando en un taller de Venecia que hacía tanto disfraces de época para carnaval como máscaras venecianas de papel maché. Durante estos dos meses he aprendido tanto como hacer las máscaras e incluso qué tipos hay (colombina, casanova, cisne, gato, Scaramouche, etc.) y a coser sobre todo a mano la pasamanería de los vestidos. El último día de trabajo, el 3 de diciembre, se celebró una fiesta privada en un hotel cerca de la plaza San Marcos en la que los invitados se vistieron con los trajes y las máscaras del taller. Creo que fue uno de los mejores días de trabajo que he tenido, fuimos hacia el hotel con los trajes en barca y allí vestimos a todos los invitados, haciendo arreglos cuando se necesitaba. El aprender una lengua nueva no era uno de mis principales motivos para hacer la movilidad, pero después de dos meses, ese día tuve que hablar en italiano todo el día y vi que había mejorado mucho y era capaz de comunicarme sin problemas. Eso me ha motivado a seguir con la lengua y tener un mayor nivel. De veras creo que ese día fue una buena despedida.

Digo esto sobre todo porque considero que el principio de mi experiencia no fue fácil, la primera semana me sentí muy sola puesto que era mi primera vez viviendo sola y además en otro país y aún no tenía amigos. Creo recordar varias veces en las que lloré. Por suerte, una amiga mía que también está teniendo su experiencia de prácticas en Holanda (Saludos Laura) después de pedirle consejo me recomendó una app llamada Bumble, que en el caso de que estés de au-pair o en unas prácticas en una empresa pequeña donde solo hay 3 personas (como era mi caso) va muy bien para hacer amigos. Todos los amigos que he hecho estos tres meses se los debo a esta app, ya que los primeros que hice los conocí ahí y el resto me los presentaron (y creo que la mayoría al principio lo pasó como lo pasé yo). La mayoría de mis amigos han sido au-pairs por lo que si algún día me planteo hacer uno ¡tengo a mucha gente a la que pedirle consejo!

Además del trabajo, he aprovechado al máximo y cada fin de semana intentaba irme por ahí (el hecho de no querer estar en el piso donde me alojaba también ayudaba, puesto que al ser solo 2 meses los que me quedaba en Italia, no encontraba nada y tuve que recurrir a airbnb donde fui a un piso en el centro de Mestre, a 20 minutos en bus desde Venecia, donde cobraban muy caro y encima no era de calidad, así que recomiendo que para el alojamiento vayáis con cuidado). Es muy normal porque cuando tienes tan poco tiempo para vivir en un país quieres ver todo lo que puedas y más. Así que yo junto con amigos au-pairs vi Burano, fui a Verona (la ciudad que tenía más ganas de ver y no dudaría en volver), a Padova, Vicenza, Treviso, Trieste, el lago de Garda, etc. Incluso el fin de semana de Halloween fui 3 días a Florencia y de paso vi Pisa y Lucca. Si viajáis en Halloween id con cuidado porque todo el mundo hace lo mismo y recuerdo que la ciudad de Florencia estaba a reventar de gente. Recomiendo también que ya si vais a hacer cualquier experiencia ya sea de prácticas o para estudiar, que llevéis ahorros previos, porque estar mínimo 2 meses sin ingresos, pagar alquiler, comida y salir a explorar los fines de semana (y comer fuera, Italia no es precisamente barata en ese sentido) es mejor ir con dinero. En cuanto a la comida prefiero no decir nada, mejor experimentadlo de primera mano, que todos sabemos que este país es conocido por eso.

En cuanto al transporte, es bastante fácil moverse en la zona del Véneto. Yo por ejemplo para ir a Venecia cogía un bus, la línea 2 que estaba debajo de mi piso, y cuando me dejaba en Venecia (Piazzale Roma) iba caminando. Venecia es pequeña así que creo que a todos lados se puede ir caminando y creo que con vaporetto, los barcos que van por el gran canal (que cuesta 7,5 euros cada viaje) se tarda lo mismo que si vas caminando. Yo cogía bonos de 10 viajes para solo bus pero hay la opción de comprar una tarjeta que cuesta 100 euros e ir recargándola cada mes con 70 euros y tienes viajes ilimitados de bus y vaporetto. En mi caso no valía para nada la pena y preferí pagar 50 al mes e ir caminando por Venecia, es más bonito y así te familiarizas con las calles puesto que si vais veréis que Google Maps allí no funciona muy bien (pero por suerte hay señales en todos lados, así que es fácil llegar a los sitios de interés). Además hay una aplicación llamada AVM Venezia donde puedes ir comprando billetes. Para viajar a cualquier otro lado del Véneto, hay estaciones de tren, tanto en Mestre como en Venecia, y con el trenitalia puedes ir a dónde sea. La verdad es que todo está muy bien comunicado.

Acabaré esta reseña con una nota más personal, tenía muchas ganas de esta experiencia, pero he de decir que me dan mucho miedo los comienzos y empezar cosas nuevas, quizás por eso quería hacer esta experiencia para poder salir de mi zona de confort y poder crecer como persona y madurar. Y ahora que ha terminado mi experiencia no cambiaría nada, ningún mal momento y mucho menos los buenos. Creo que todo lo que he vivido me ha ayudado un poquito a madurar, a ser más independiente y a crecer como persona. Y no puedo esperar a volver a recorrer otra aventura como esta.

Quiero hacer especial mención a mis amigas de Venecia y alrededores: Lourdes, Irene, Blanca, Yasmina, Carmen, Caroline, Yuka, Mako, Rabea, Lexi y a todos los que he conocido de pasada. He pasado muchos buenos tiempos con ellos y espero de corazón poder verles a todos muy pronto.